Una breve historia de los pisos para gimnasio y crossfit

En la antigua Grecia los gimnasios eran utilizados para educar a los jóvenes, y estos tomaban las clases al desnudo. La palabra gimnasio significa desnudez y es derivada del griego gymnos. Varios siglos después aparecieron los gimnasios en Alemania y eran llamados Tuners. Uno de los primeros gimnasios techados de todos los tiempos (sin tener pisos especiales) fue edificado en 1852 en la ciudad de Hesse, pero fue hasta el inicio del siglo XX que se construyo un gimnasio en la Universidad de Harvard, entonces la tendencia de los gimnasios llegó a Estados Unidos y se hicieron tan populares que en la mayoría universidades construían gimnasios. Así llegaron a toda América del Norte hasta llegar a México.

Con el paso de los años estos lugares de acondicionamiento empezaron a agregar muchas disciplinas, como defensa, artes marciales y natación, con esto se tuvieron que adaptar los gimnasios para crear instalaciones con más seguridad y que fueran más cómodas para las personas que iban a ejercitarse, una de las medidas que se tomaron fue poner un piso especial llamado piso para gimnasio hechos de un material especial, básicamente hule de alta calidad que resistiera los impactos de las caídas de barras para evitar que se rompiera el suelo, aparte de aminorar el peligro de que le rebotara a otros atletas, también se construyeron ciertos aparatos con peso para que los principiante se acostumbraran a usar la técnica de manera correcta y no sufrieran percances.

En la actualidad son tan comunes los pisos para gimnasio que ya no son exclusivos de las áreas para hacer deporte, hoy en día los encontramos en escenarios, centros de espectáculo, áreas infantiles y en nuestros hogares.